El sistema nervioso central está conformado por el cerebro y por la médula espinal, ambas estructuras transmiten señales a todo el organismo, por lo que el sistema nervioso es el encargado de controlar nuestra capacidad de respirar, movernos, pensar y de llevar a cabo todas las funciones vitales.
La unidad básica de este gran sistema son las células nerviosas o neuronas, ellas son las encargadas de controlar o realizar diferentes funciones. De esta manera, las neuronas motoras envían señales del cerebro a los músculos para generar movimiento. Las neuronas sensitivas detectan luz, sonido, olor, sabor, presión y calor y envían señales sobre estos estímulos al cerebro. La comunicación entre neuronas llamada sinapsis puede verse favorecida con el consumo de algunos nutrientes y ahora que sabemos la importancia que tiene esta comunicación neuronal, te dejamos 3 suplementos claves para cuidar tu sistema nervioso central.
El DHA es un tipo de ácido graso omega 3, es esencial ya que nuestro cuerpo no puede producirlo y debe ingerirlo a través de la alimentación. Existen dos vías para obtenerlo, la primera mediante el consumo de ácidos grasos precursores ALA de origen vegetal provenientes de semillas como la chía, linaza, canola, nueces, cáñamo, que luego nuestro organismo debe convertir a DHA o la segunda vía es consumirlo directo a través de suplementos o alimentos de fuentes vegetales como las microalgas o de animales como los pescados grasos. El DHA representa más del 90% de los ácidos grasos presentes en el cerebro, por lo que su presencia en clave, desde que comienza la gestación hasta la adultez.
El DHA les otorga flexibilidad y fluidez a las membranas plasmáticas neuronales, facilitando la transducción de señales hacia el interior de la célula. En el cerebro el DHA participa en el crecimiento neuronal, el movimiento neuronal y en las sinapsis o comunicación neuronal.
Algunos estudios afirman que la disminución del nivel plasmático de DHA se asocia con envejecimiento cerebral y con el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas tanto en adultos mayores sanos como en pacientes con diagnóstico de enfermedad de Alzheimer y que las personas que presentan una mayor ingesta de DHA muestran un menor riesgo de desarrollar deterioro cognitivo.
También es una vitamina esencial, es de origen bacteriano y es vital para el correcto funcionamiento del sistema nervioso central. Esta vitamina es necesaria para la producción de mielina, una capa que cubre el cuerpo de las neuronas y sin ella la sinapsis y la transmisión de señales por medio de impulsos nerviosos se ve afectada y enlentecida. Un déficit prolongado de vitamina B12 puede ser factor de riesgo para la progresión de enfermedades como el Parkinson y el Alzheimer.
Es una sustancia natural que se encuentra en el músculo esquelético y que participa en la producción de energía durante el ejercicio. Se ha estudiado que la creatina puede mejorar el rendimiento cognitivo y la salud cerebral de las personas mayores. La creatina es un componente esencial de la fosfocreatina, una molécula que almacena y transporta energía en el cerebro. La suplementación con creatina puede aumentar los niveles de fosfocreatina cerebral y mejorar el metabolismo energético neuronal, esto puede tener efectos positivos sobre la memoria, la atención, el aprendizaje y la prevención del deterioro cognitivo asociado al envejecimiento.
La evidencia revela que los deportistas que toman creatina, experimentan una menor incidencia de lesiones en comparación con aquellos que no complementan su alimentación con suplementación de creatina.
Dicha capacidad de regenerar lesiones, no sólo ayuda a la recuperación post ejercicio, sino también a la rehabilitación y a la neuroprotección de la médula espinal y a la conmoción cerebral en deportes de contacto.