Los seres humanos somos seres integrales, o sea, no podemos separar nuestro estado mental, emocional y físico. Si alguno de ellos se ve afectado influye directamente en los demás. Por eso para lograr un bienestar completo debemos preocuparnos de todas las áreas de nuestra vida.
¿Te has preguntado alguna vez qué significa para ti el bienestar?
Probablemente sentirnos bien es una de nuestras principales aspiraciones, pero no siempre sabemos bien qué necesitamos para lograrlo. El bienestar es la suma de cosas que necesitamos para vivir bien, por lo tanto, para lograrlo tenemos que mirar nuestra vida como un todo, y trabajar porque cada aspecto esté en equilibrio.
Cuando lo pensamos así, suena a una tarea titánica muy difícil de lograr. Pero si separamos este objetivo global en pequeñas metas, se transforma en algo mucho más simple y fácil de alcanzar. Por eso, aquí compartimos algunas ideas de pequeños cambios que puedes hacer en tu día a día para que te acerques cada vez más a tu mayor bienestar.
1. Lleva una dieta balanceada
La base para una buena salud está en cómo nos alimentamos, en incluir todos los macro y micronutrientes que necesitamos de acuerdo a nuestros requerimientos.
Disminuir el consumo de comida chatarra, dejarlo para ocasiones especiales, pero que la base de nuestra alimentación sea menos procesada, con todos los grupos de alimentos y variada. Al alimentarnos bien tendremos más energía, mejor sueño y un estado general más saludable.
2.Toma agua
Muchos procesos corporales dependen de la hidratación, y si no consumimos suficiente líquido podemos sentir malestares como dolor de cabeza, dolor muscular, cansancio, etc. ¡Ojo! No sólo el agua es hidratante, también las frutas y verduras, sopas, té, café, jugos, etc.
3.Tiempo de relajo
Para que nuestro estado mental esté bien, es necesario desconectarnos de las funciones productivas y encontrar un espacio de esparcimiento. Así como en el colegio los niños tienen recreos programados, los adultos también necesitamos desconectarnos de las preocupaciones, del trabajo, de las responsabilidades diarias para descansar nuestra mente.
4. Proponte Metas
Tener objetivos en la vida nos da motivación para hacer cosas. Pueden ser metas laborales, familiares, proyectos personales, objetivos deportivos, lo que sea que te den ganas de verdad de lograr. Pero tener algo hacia dónde apuntar nuestras energías, le da sentido a nuestros esfuerzos y nos ayuda a seguir adelante aunque tengamos algún traspié. Además, al cumplir estas metas vamos generando satisfacción con nuestra vida.
5. Relaciones interpersonales
Los seres humanos somos seres sociables por naturaleza. Esto no significa tener una agenda llena de panoramas o que estemos obligados a compartir diariamente con otros. Pero sí necesitamos sentir que pertenecemos a algún lugar, que tenemos una red de contención. Por eso, para sentirnos bien es importante tratar de resolver los conflictos que podamos tener con nuestros más cercanos y tener siempre alguien con quién contar.
6. Ten una vida activa
Realizar actividad física 30 minutos al menos 3 veces a la semana no sólo contribuye a nuestra salud física, también ayuda a la salud mental.
Al movernos se generan endorfinas que nos dan sensación de bienestar, disminuye el stress y el cansancio mental. Puede ser cualquier actividad que te saque del sedentarismo como hacer yoga, caminar, bailar, correr, andar en bicicleta, jugar fútbol, lo que sea que te motive lo suficiente como para generarte adherencia.
7. Contacto con la naturaleza
Salir de los espacios urbanos, ver otros colores, sentir otros olores, vivir la calma de la naturaleza, todo ayuda a generar un estado positivo mentalmente. Somos parte de la naturaleza aunque vivamos en ciudades rodeados de tecnología, volver a la naturaleza es reconectarnos con nuestras raíces.
8. Hobbies
Tener alguna entretención y actividad constante más allá de la carga laboral, que pueden ser manualidades, cocinar, algún juego, incluso el deporte se puede tomar como hobby si lo incorporamos en nuestra vida como una actividad no competitiva. Esto nos ayuda a distraernos y enfocar nuestras energías en algo que nos entretiene y hace felices.
9. Duerme bien
Tan importante como la alimentación, es descansar adecuadamente. Un adulto necesita entre 7 y 8 horas de sueño diarias para recuperarse bien. La falta de descanso altera el apetito, aumenta el stress, disminuye las capacidades cognitivas, afecta el estado anímico y puede producir malestares físicos como jaquecas.
10. Equilibrio y balances
No te exijas hacer todo “como corresponde”. Si un día quieres comer desordenado, date el permiso y disfrútalo. Tómate un trago de vez en cuando. Trasnocha si estás entretenido, o madruga si quieres hacer algo demasiado temprano. Si un día no quieres hacer nada, descansa. No tengas miedo de salir de la rutina. Una vida saludable también incluye la recreación y el relajo.
No dejes pasar más tiempo, empieza hoy a trabajar en tu calidad de vida. Cada pequeño cambio que hagas te llevará hacia un mejor estado físico, mental y emocional. Para un minuto, piensa y decide por dónde comenzar. Y así en poco tiempo lograrás acercarte a tu bienestar integral.
Escrito por: Pepa Canales, trail runner y periodista