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Autor: All Nutrition

Publicado: 2023-01-05

El deporte tiene importantes beneficios para nuestra salud: disminuye el stress, mejora nuestro estado en general, regula la composición corporal, etc. Pero ¿qué pasa con nuestra piel?

La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y cumple importantes funciones como regular la temperatura, protegernos del exterior, es una barrera de entrada e intercambio, sintetiza vitamina D y almacena agua y grasas entre otras cosas. Por eso cuidarla adecuadamente va mucho más allá de los beneficios estéticos, es un asunto de salud.

Cuando hacemos deporte nuestra piel se ve expuesta a muchos estímulos: el calor, la sudoración, el frío, el viento, la deshidratación, los roces etc. Pero si tomamos las medidas adecuadas para protegerla de todas las agresiones, podemos hacer deporte tranquilamente y aprovechar los beneficios que trae la actividad física para la piel.

Efectos del sol

Muchas actividades deportivas se realizan al aire libre, y aunque estemos en invierno o haya días nublados, el sol sigue estando presente. Esta exposición es beneficiosa y hasta necesaria porque gran parte de nuestra dosis de vitamina D la obtenemos de esta forma. Pero el exceso de sol o la falta de cuidados preventivos son los que pueden traernos quemaduras, deshidratación, manchas en la piel y envejecimiento prematuro. Para prevenir todos estos daños es esencial el uso de un bloqueador solar superior a 30+ y evitar en la medida de lo posible hacer deporte en las horas centrales del día. También podemos tomar medidas adicionales como uso de viseras o jockeys e intentar estar a la sombra.

Sequedad

El sol, el agua salada y el frío alteran el equilibrio de la piel y provocan sequedad. En grados extremos se pueden provocar heridas y grietas, como suele pasar por ejemplo con los labios cuando vamos a la nieve. Por eso es importante la hidratación antes, durante y después de la actividad física, tanto oral como cutánea. El uso de cremas hidratantes ayuda muchísimo en la prevención y recuperación.

Ampollas

Cuando hacemos deporte sube nuestra temperatura corporal y como respuesta, sudamos. La humedad hace que nuestra piel esté más expuesta a fricciones, típicamente en los pies o las manos, y se provocan ampollas. La mejor prevención es el uso de materiales deportivos adecuados: zapatos de talla y horma correcta, calcetines no abrasivos y que no sean sueltos y lo mismo con los guantes y otros implementos en contacto con nuestra piel. Aquí siempre lo mejor será prevenir.

Infecciones

Es común que durante la práctica deportiva nos hagamos lesiones por roces, caídas, por fricción y también que nuestra piel vea alterada su capacidad de aislar del exterior. Por eso se pueden producir infecciones virales, bacterianas o aparición de hongos. Esto no es normal y no es parte

de los efectos naturales del deporte. Ante cualquier signo de irritación excesiva, enrojecimiento, heridas que no cierran, etc hay que consultar con un dermatólogo.

 

Cuidados de la piel

Para prevenir estas molestias y otras como alergias, deterioro de la piel o envejecimiento prematuro debemos ser responsables con el cuidado y la prevención. Aquí te dejamos algunos consejos para que realices deporte sin descuidar tu piel.

- Usa jabones y shampoo suaves, hipoalergénicos y preocúpate de sacar todo el sudor cuando te duches. En la medida de lo posible dúchate inmediatamente después de cada práctica deportiva.

- Siempre elimina el maquillaje antes de entrenar, porque puede producir alergias y dificultar la respiración capilar.

- Usa siempre bloqueador solar con factor sobre 30.

- Usa ropa apropiada, de tu talla, respirable y de secado rápido.

- Hidrátate siempre, no sólo cuando tengas calor.

- Después de entrenar y de ducharte si sientes que estuviste expuesto al sol o tu piel quedó sensible, los geles de aloe vera te pueden ayudar a rehidratar y calmar la piel.

- Cuida tu piel a diario con productos dermatocosméticos que la fortalezcan y preparen adecuadamente para la exposición constante a estímulos agresores. Una excelente alternativa son los serum con vitamina C. La vitamina C ayuda a la reparación de la piel y a fortalecer los capilares.

- Visita una vez al año al dermatólogo.

- Cuida tu alimentación, incluye siempre alimentos ricos en antioxidantes como frutas, verduras y frutos secos.

El deporte puede ayudarnos a tener una piel más sana. Al aumentar la circulación sanguínea se irriga y oxigena mejor, y recibe más nutrientes. Además, a través del sudor también se eliminan impurezas y disminuye la frecuencia de puntos negros y granitos. Como la actividad física mejora nuestro estado de ánimo y disminuye el stress, también ayuda a disminuir signos del cansancio como palidez o las ojeras.

Como ves, son muchos los beneficios del deporte para la piel. Pero para que puedas aprovecharlos, tienes que ser responsable con los cuidados frente a las constantes agresiones a las que expones tu piel durante la actividad física.

Escrito por: Pepa Canales, trail runner y periodista

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